CAPÍTULO 5: "Leah"
- Quiero que me cuentes lo que está pasando Jake, ahora! – me decía mientras sus lágrimas recorrían su rostro de una forma imparable… - que quiere esa gente de mi… y qué demonios haces tu convirtiéndote en hombre lobo! Jake!
Me dolió muchísimo verla así. Estaba realmente asustada, quien no…, y no sabía que contestarle. No sabía qué era lo que quería Edward de ella…
- No lo se Bella… - le dije bajando poco a poco la mirada, pero ella me alzó la barbilla con la punta de sus suaves y delicados dedos.
- Que no lo sabes? Después de dos años regreso aquí, pensando que sería el mejor lugar del mundo… pensando que te tengo a ti, a mi padre, Leah… y me encuentro con esto? O me lo cuentas todo ahora o te juro que me vuelvo a casa! -
- Bella porfavor… te piensas que esto no es difícil para mi? Tu no eres la que se convierte en un licántropo cada vez que se enfurece o pierde los estribos. Ni tampoco la que ha perdido a su mejor amiga!
Paró de nuevo su mirada en la mia. Y poco a poco se fue acercando a mi, hasta que pude oler su dulce aroma. Me rodeó el cuello con sus brazos mientras me acercaba más a ella y cuando estuvo lo suficientemente cerca de mi oído me susurró – lo siento, estoy tan asustada… - el corazón me latía cada vez más rápido, su olor se filtraba tanto por mi piel como por mi nariz, estar con ella me atontaba de una manera… la adoraba. –vamos, te llevaré a casa. – la cogí de la mano y salimos de aquel sitio seguidos por algunos miembros de la manada, ya que otros se habían adelantado para vigilar la casa de Bella.
Todo estaba tranquilo cuando llegamos. El jefe Swan todavía no había llegado de trabajar, así que me pidió que me quedara un rato con ella.
- Así que eres un hombre lobo… - dijo poniendo los ojos en blanco.
- Sip, está bastante bien… ahora soy más rápido y estoy más fuerte! – fardé un rato de mi fisonomía y luego dejé entrever esos blancos y grandes dientes que tenia. Ella bajó la mirada avergonzada y luego se rió conmigo. Pero de pronto se puso seria y prosiguió con las preguntas.
- No, enserio Jake. Desde cuándo eres asi?
- Hace unos meses, cuando Leah decidió formar parte de los vampiros.
- Vampiros? – me preguntó confusa. – son… vampiros? Pero… como? – y negó con la cabeza como si no fuera posible que hubieran ese tipo de bichos por aquí.
- No lo se Bella, no sé mucho más que tu. Sólo se que aparecieron cuando Leah… - pero no pude acabar de hablar, ella me presionaba para que hablara más rápido.
- Leah… que? - me dijo enarcando una ceja. – Es tu amiga, bueno… era tu mejor amiga, nuestra amiga recuerdas? Que hace con esa gente?
- Ya no tiene nada que ver conmigo, ni con nosotros. Ella eligió esa vida, asi que no nos podemos meter. Ya los has visto, es imposible hablar civilizadamente…
Vale, tenia miedo. Miedo de enfrentarme a ellos por Leah y perder. Perderla a ella, a Bella… a mi manada. Mi mejor amiga había elegido eso, era lo mejor para ella, lo comprendo, pero teníamos que asumir las consecuencias: no volver a compartir momentos, ni estar juntos… nada.
- Pero… no lo entiendo. Hay muchas cosas que no entiendo. Porqué decidió irse con ellos?
- Es algo bastante serio Bella, me da cosa decirlo… me pone de muy mal humor – y me entristecía, tanto que se me cayó una lágrima. Pero por suerte Bella no se dio cuenta. Poco después, le eché valor y encaré al gran problema, por su culpa Leah tuvo que tomar esa decisión. – Hace como dos meses, Leah recibió una carta. Eran los resultados de unos análisis. No me había contado nada acerca de esas pruebas, pero como estaba con ella el dia que recibió esa carta me lo tuvo que explicar todo. Se sentía muy avergonzada, lo que ponía en aquel papel era algo muy importante y bastante serio.
- Que ponía Jake? – me insistió –
- No podía tener hijos – en ese momento Bella se acercó más a mi y me cogió de las manos, pudiendo sentir el latido de su corazón a través de la punta de sus dedos. - Por eso decidió marcharse. No quería ser un licántropo, no es lo normal en una mujer asi que aparecieron ellos y Le propusieron esa vida, igualmente no podría tener hijos, pero no sufriría la humillación de vivir como un lobo. Todo el mundo sabría de que carece. Pero yo nunca lo he visto así. Ella es especial… es Leah… - no pude resistir más y dejé que saliera ese nudo de mi garganta, llevándose con él algunas de mis lágrimas.
- Oh Jake… Debe de haber sido súper duro para ella. Sobretodo dejarte a ti, a su familia… a Seth! Que dijo él cuando se enteró?
- Bueno, él la apoya y la comprende. Pero claro, no pueden estar juntos. Y bueno Sue… la ha dado por muerta. No quiere saber nada de ella. Eso si que fue duro.
- Pero… porque hizo eso Sue? Es su madre, su hija!
- Leah estaba destinada a ser mujer lobo. Y como no lo aceptó pues, su madre… bueno, una manera de decirlo sería que la desterró de La Push. Así que también ese fue el motivo que la condujo a la otra vida. Y todo esto a pasado en menos de tres meses. Pero no sabes lo que más me enfurece… No haber podido ser hombre lobo antes y poder protegerla. Si hubiera organizado toda esta manada con ella igual que como lo he hecho contigo… ella seguiría aquí, con nosotros… podría seguir notando su corazón como lo hago con el tuyo… la echo tanto de menos Bella… tanto! - y mis palabras se perdieron poco a poco con mis lágrimas.
3 comentarios:
Ohhhhh
Leah !!!!!!!!!!!!!!
Una decisión muy fuerte ...
Y ese Seth jeje siempre de bonachon ...
Me agrada xD
bien marta , me gusta, espero q no tardes con la siguiente parte.
bss
Pobre Leah... pero vamos, estoy deseando ver cómo sigue la cosa, y saber qué interés tenían los Cullen tanto en Leah como en Bella. El pobre Jacob tiene que estar reviviendo la historia pero en vez de con su mejor amiga, con la chica de sus sueños. No tardes en actualizar, porfa! Besicos
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